miércoles, 9 de octubre de 2019

Cardenal Müller: Han expulsado a Jesús del Sínodo para la Amazonia


Cardenal Müller: Han expulsado a Jesús del Sínodo para la Amazonia

LA IGLESIA NO PUEDE HACERSE PROTAGONISTA DEL «NEOPAGANISMO AMBIENTALISTA»


En una entrevista llevada a cabo por Matteo Matzuzzi para el diario «Il Foglio», el cardenal Müller acusa al Sínodo para la Amazonia de expulsar a Jesús y advierte que el Señor «dio su vida para la salvación de los hombres, no del planeta»

Según recoge Sandro Magister en su blog Settimo cielo, el Prefecto emérito de la Congregación para la Doctrina de la Fe, advierte que el Sínodo amazónico puede tener «consecuencias sobre la Iglesia universal». Y señala que, a pesar de tratar sobre la región amazónica, «si se escuchan las voces de algunos de los protagonistas de esta asamblea se comprende fácilmente que la agenda es totalmente europea».
El purpurado alemán relaciona el Sínodo para la Amazonia con el que va a tener lugar en su tierra natal:
«En Alemania quieren casi refundar la Iglesia Católica. Piensan que Cristo es sólo un hombre que vivió hace dos mil años, consideran que no fue un hombre moderno, están convencidos que no tenía nada de su docta formación. Por eso piensan que es necesario llenar estas lagunas y que les espera actuar a ellos. En una homilía, el cardenal Marx ha preguntado retóricamente: ‘Si Cristo estuviese aquí hoy, ¿diría lo que dijo hace dos mil años?’ Pero Cristo no es una figura histórica como el César. Jesucristo es el resucitado que está presente, que celebra la Misa a través de su representante ordenado sacerdote. Es el sujeto de la Iglesia y su Palabra permanece y vale eternamente. Cristo es la plenitud de la Revelación, por eso no habrá otra Revelación. Somos nosotros los que debemos buscar conocerla más y mejor, ciertamente no podemos cambiarla. Cristo es insuperable e irreversible, pero esto hoy no parece ser muy claro en ciertas latitudes».
Para Müller este error está presente también en el Instrumentum laboris, el documento base del Sínodo sobre la Amazonia: «un documento que no habla de la Revelación, del Verbo encarnado, de la Redención, de la Cruz, de la Vida eterna», sino que más bien ensalza en lugar de la Revelación divina, para asumir como tales, a las tradiciones religiosas de los pueblos indígenas y sus cosmovisiones.
Ante la idea de la ordenación de sacerdotes casados como manera de satisfacer el supuesto derecho a recibir sacarmentos, el cardenal asegura que «no existe ni puede existir un derecho al sacramento. Nosotros somos creaturas de Dios y una creatura no puede reclamar un derecho a su creador. La vida y la gracia son un don. El hombre tiene el derecho de casarse, pero no puede pretender que una determinada mujer lo despose reivindicando un derecho específico. Jesús eligió libremente entre todos sus discípulos a doce de ellos, presentando así su autoridad divina. Eligió a los que él quiso, es Dios quien elige. Nadie puede entrar en el santuario sin ser llamado. Una vez más prevalece la mentalidad secularizada: se piensa como los hombres, no como Dios».
Y añade:
«El celibato sacerdotal se puede comprender sólo en el contexto de la misión escatológica de Jesús, quien ha creado un mundo nuevo. Ha habido una nueva creación. Con las categorías del secularismo no se pueden comprender la indisolubilidad del matrimonio, así como el celibato o la virginidad de las órdenes religiosas. Con tales categorías tampoco se pueden resolver problemas que tienen su origen exclusivamente en la crisis de la fe. No se trata de reclutar más gente para administrar los sacramentos, sino que es necesaria una preparación espiritual, es necesario entrar en la espiritualidad de los apóstoles. Es necesaria una preparación espiritual y teológica, se necesita entrar en la espiritualidad de los apóstoles, no prestando atención a las agencias laicas que aconsejan mucho y sobre muchas cosas por razones totalmente contrastantes con la misión de la Iglesia. Sirve la espiritualidad, no la mundanización».
En cuanto al auge del activismo ecológico, Müller dice:
«La Iglesia es de Jesucristo y debe predicar el Evangelio y dar esperanza para la vida eterna. No puede hacerse protagonista de alguna ideología, ya sea la del ‘gender’ o la del neopaganismo ambientalista. Es peligroso si sucede esto. Vuelvo al ’Instrumentum laboris’ preparado para el Sínodo sobre la Amazonia. En uno de sus párrafos se habla de la ‘Madre Tierra’: pero ésta es una expresión pagana. La tierra viene de Dios y nuestra madre en la fe es la Iglesia. Nosotros somos justificados por la fe, la esperanza y el amor, no por el activismo ambiental. Es cierto que el cuidado de lo creado es importante, después de todo vivimos en un jardín querido por Dios. Pero no es éste el punto decisivo. Lo es el hecho que para nosotros Dios es lo más importante. Jesús dio su vida para la salvación de los hombres, no del planeta».
Y concluye:
«Ciertamente la Iglesia puede dar su propia contribución con una buena ética, con la doctrina social, con el magisterio, recordando los principios antropológicos. Pero la primera misión de la Iglesia es predicar a Cristo, el Hijo de Dios. Jesús no le dijo a Pedro que se ocupara del gobierno del imperio romano, no entra en diálogo con el César. Se mantuvo a una buena distancia. Pedro no era amigo de Herodes o de Pilato, sino que sufrió el martirio. Es justa la cooperación con un gobierno legítimo, pero sin olvidar jamás que la misión de Pedro y de sus sucesores consiste en unir a todos los creyentes en la fe en Cristo, que no ha encomendado que se ocuparan de las aguas del Jordán o de la vegetación de Galilea».

Mons. Escudero defiende la vigencia del celibato




Mons. Escudero defiende la vigencia del celibato y recuerda que no faltan vocaciones donde reina la sana doctrina

Mons. Rafael Escudero López-Brea, obispo prelado de Moyobamba (Perú) y padre sinodal, realizó este martes una brillante intervención en la Congregación General del Sínodo para la Amazonia en defensa del celibato e indicando los problemas que plantea la propuesta del Instrumentum Laboris sobre la ordenación de hombres

Mons. Rafael afirmó que la ordenación de varones ancianos casados, con la tarea de administrar los sacramentos, pero sin las de enseñar y gobernar, separaría el munus sanctificandi de los munera regendi y docendi. Esto supondría «una novedad en el plano eclesiológicoen la estructura jerárquica-sacramental que la Iglesia tiene por mandato divino». En definitiva, la reducción de la identidad del sacerdote católico lo llevaría a ser «un mero funcionario de Misa».
Desde su experiencia de obispo amazónico, insistió en la necesidad de «una evangelización que anuncie a Jesucristo como único salvador de los hombres, de los pueblos y las culturas».
Además, realizo la siguiente observación: «no faltan hoy vocaciones y sacerdotes en las diócesis y congregaciones religiosas que se forman en la sana doctrina de la Iglesia y viven una auténtica espiritualidad cristiana».
Transcripción de las palabras de Mons. Rafael Escudero:
Un desafío importante de la evangelización en la Amazonia es la carencia de sacerdotes que puedan atender las comunidades católicas. La solución que propone el Instrumentum Laboris es la de estudiar la posibilidad de ordenar varones ancianos casados, concediéndoles sólo la tarea de administrar los sacramentos, pero no dice nada de la tarea de enseñar y gobernar. En consecuencia se hace una separación entre el munus sanctificandi, el munus regendi y el munus docendi. De esta manera se introduce una novedad en el plano eclesiológico, en la estructura jerárquica-sacramental que la Iglesia tiene por mandato divino. Se propone una nueva visión del Orden que no procede de la Revelación, sino de los usos culturales de los pueblos amazónicos que prevén, entre otros, «una autoridad por rotación» (IL 127), y se invita a reconsiderar la obligatoriedad del celibato. Los hombres ancianos casados ordenados supondrían una especie de sacerdocio de segunda categoría y se reduciría la identidad del sacerdote católico a una mera funcionalidad sacramental. El sacerdote, de ser pastor de la comunidad, fuente de consejo, maestro de vida cristiana, presencia cercana de Cristo, pasaría a ser un mero funcionario de Misa.
La Iglesia existe para evangelizar, nos recordaba San Pablo VI en «Evangelii nuntiandi». La primera misión del Sínodo será ver cómo, con sumo respeto, podemos evangelizar a quienes, por no conocer a Jesucristo, que es el Camino, la Verdad y la Vida, viven sin respuesta a los grandes interrogantes del ser humano. No podemos olvidar que la mayoría de los habitantes de la Amazonía no son católicos: viven, por eso, privados de conocer el Amor infinito que es Jesucristo. Lo urgente es evangelizar en profundidad enviando los mejores sacerdotes, religiosos y laicos de las diócesis y congregaciones religiosas que dispongan de más agentes pastorales. Una evangelización que anuncie a Jesucristo como único salvador de los hombres, de los pueblos y las culturas, que cree comunidades donde se viva intensamente la fe católica probada.
La formación de animadores y catequistas es fundamental para poder mantener vivas esas comunidades hasta que éstas puedan contar con sacerdotes propios. Los obispos y sacerdotes de la Amazonía hemos de esmerarnos más en la formación integral de los animadores y en la pastoral vocacional. Y de un pueblo evangelizado y bien formado surgirán carismas y, entre ellos, el del celibato para el sacerdocio.
Hay penuria eucarística en la Amazonia y en muchos lugares del mundo, pero no faltan hoy vocaciones y sacerdotes en las diócesis y congregaciones religiosas que se forman en la sana doctrina de la Iglesia y viven una auténtica espiritualidad cristiana.
Sí existe una deficiente distribución de los sacerdotes y tenemos necesidad de dedicarnos a nuestro ministerio esencial: orar, predicar, celebrar los sacramentos y expulsar los demonios. Hay demasiados obispos y sacerdotes en las diócesis dedicados a tareas que no le son tan propias como la administración, el profesorado, las secretarías. Es hora que nosotros, como decían ya los Apóstoles, «nos dediquemos más a la oración y a la predicación de la Palabra» (Hch 6,4).
Mons. Escudero no fue el único padre sinodal en defender la vigencia del celibato sacerdotal en el sínodo. También lo hicieron según informa Aci Prensa, los cardenales Robert Sarah, prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos; y Peter Turkson, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral. Igualmente Mons. Emiliano Antonio Cisneros Martínez, Obispo de Chachapoyas (Perú); Mons. Waldo Rubén Barrionuevo Ramírez, Vicario Apostólico de Reyes (Bolivia); y el sacerdote salesiano Martín Lasarte Topolanski.


Un periodista le recuerda al cardenal Barreto que veinte pueblos indígenas practican el infanticidio


Un periodista le recuerda al cardenal Barreto que veinte pueblos indígenas practican el infanticidio


En la rueda de prensa posterior a la segunda jornada del Sínodo para la Amazonia, un periodista ha preguntado al cardenal peruano Pedro Ricardo Barreto por el hecho de que el sínodo presente a los indígenas como «gente pura e inocente», cuando unos veinte pueblos amazónicos practican hoy en día el infanticidio. El cardenal dijo desconocer un hecho que, sin embargo, el Cardenal fu contradicho por la Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas quien confirmo lo afirmado por el periodista.

En su intervención, el cardenal Pedro Ricardo Barreto Jimeno, Arzobispo de Huancayo en Perú y Vicepresidente de la Red Eclesial Panamazonica, recordó como la Iglesia siempre se ha preocupado siempre por los pueblos indígenas –citando a los papas Benedicto IX y San Pío X– y resaltó la importancia de la figura de San Francisco de Asís.
La polémica, sin embargo, surgió cuando un periodista preguntó al cardenal cómo era posible que en el Sínodo, ignorando las consecuencias del pecado original, se presente a todos los indígenas de una forma idílica –«gente pura e inocente»– cuando hay al menos 20 tribus que practican habitualmente el infanticidio. El periodista, tras añadir que la Conferencia Episcopal Brasileña indicó que tal hecho forma parte de la cultura integral indígena, ha requerido el parecer de Victoria Lucia Tauli-Corpuz, Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, participante en el Sínodo
El cardenal ha respondido que aunque saben que no todo es perfecto entre los pueblos indígenas, «nunca he escuchado que 20 tribus practiquen el infanticidio. Esto no se puede decir tan a la ligera, ya que apunta a una situación de salvajismo». Y ha añadido que si algo está muy claro es que la Iglesia defiende la sacralidad de la vida humana, tras lo cual ha señalado que el papa Francisco habló ayer de aquellos que se burlan de que los indígenas lleven plumas en la cabeza. Luego ha asegurado que si alguien en la Iglesia sostiene que esa prácticas son admisibles, está rechazando la esencia del Evangelio.
Sin embargo, Tauli-Corpuz admitió que la ONU conoce dichas prácticas «contrarias a los estándares internacionales sobre los derechos humanos» y que además los propios indígenas han reconocido que deben cambiar algunas de sus tradiciones. Y ha añadido: 

«Los pueblos indígenas tienen la obligación de hacer que su cultura sea coherente con las normas internacionales sobre derechos humanos»

Proponen la creación «ad experimentum» de una misa de rito católico amazónico

Proponen la creación «ad experimentum» de una misa de rito católico amazónico

La segunda sesión del Sínodo para la Amazonia ha abordado no solo la cuestión de los jóvenes y la ecología, sino temas que suscitan interés entre los padres sinodales:

Ritos indígenas

Según Vatican.news, ha habido lugar para la reflexión sobre los ritos indígenas: la Iglesia -se ha dicho- considera con benevolencia todo lo que no está ligado a las supersticiones, siempre que pueda armonizarse con el verdadero espíritu litúrgico. De ahí la sugerencia de iniciar en la Amazonía un proceso de compartir las experiencias de aquellas comunidades indígenas que han inculturado celebraciones para ciertos sacramentos como el bautismo, el matrimonio o la ordenación sacerdotal. De este modo, una de las propuestas que se plantearon fue la de establecer, ad experimentum y según el correcto discernimiento teológico, litúrgico y pastoral - un rito católico para la misa amazónico para vivir y celebrar la fe en Cristo. Después de todo, se subrayó, así como hay un ecosistema ambiental, también hay un ecosistema eclesial.

RELIGIOSA EXCOMULGADA PARTICIPA EN EL SINODO PARA LA AMAZONIA Y AFIRMA OIR CONFESIONES

RELIGIOSA EXCOMULGADA PARTICIPA EN EL SÍNODO PARA LA AMAZONIA Y AFIRMA OÍR CONFESIONES


La religiosa Alba Teresa Cediel Castillo, de las Misioneras de la Madre Laura, y participante del Sínodo para la Amazonia, ha asegurado que la participación de la mujer en la vida de la Iglesia tiene que ser «mucho más grande» pero «piano, piano (despacio)».

Durante la rueda de prensa posterior a la primera reunión general del Sínodo de la Amazonía, Cediel Castillo ha indicado que ellas en la Amazonía bautizan, son testigos del amor cuando una pareja se quiere casar e incluso escuchan confesión aunque no puedan dar la absolución. 

Lo dicho por la religiosa, las hace incurriendo en  excomunión latae sententiae (automatica) reservada a la Sede Apostólica, de conformidad con el canon 1378 y 1379 del Código de Derecho Canónico para la Iglesia Latina, ya que estarían  “simula la administración de un sacramento” con grave confusión a los fieles, pues “no pudiendo administrar válidamente la absolución sacramental, trata de darla, u oye una confesión sacramental.” Lo cual trae aparejado la Excomunion latae sententiae, lo cual le impediría participar en el sínodo.

«Acompañamos a los indígenas en los diferentes eventos, cuando el sacerdote no puede hacer presencia y se necesita que haya un bautismo, nosotras bautizamos, si alguien se quiere casar, nosotras hacemos presencia y somos testigos de ese amor, y muchas veces nos ha tocado escuchar en confesión, no hemos dado la absolución pero en el fondo de nuestro corazón hemos dicho: 'Con la humildad de que este hombre o mujer se acerque a nosotras, por situaciones de enfermedad o ya próximos a la muerte', nosotras creemos que Dios Padre también actúa ahí», ha explicado.

jueves, 3 de octubre de 2019

CRUZADA DE ORACION POR EL SINODO PARA LA AMAZONIA



CRUZADA DE ORACION POR EL SINODO PARA LA AMAZONIA



ORACION POR LOS PADRES SINODALES
Señor Dios nuestro, protector y guía de tu Iglesia, infunde en tus servidores LOS PADRES SINONALES DE LA AMAZONIA el espíritu de inteligencia, de verdad y de paz, para que conozcan lo que te agrada y tengan el valor de realizarlo. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amen.

ORACION POR EL PAPA
Dios nuestro, que en tu providencia edificaste tu Iglesia sobre el fundamento de Pedro y lo pusiste al frente de los demás apóstoles, mira con bondad a nuestro Papa FRANCISCO a quien has constituido sucesor de Pedro, y concede que sea, para tu pueblo, principio y fundamento visible de la unidad de la fe y de la comunión. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amen.

ORACION A LA VIRGEN MARIA
Gloriosa Reina del cielo, sublime Señora de los Ángeles, desde el principio Dios te dio la virtud y la misión de aplastar la cabeza de Satanás. Muy humildemente te suplicamos nos envíes tus legiones celestiales para que bajo tu mando y por tu virtud, repriman a los espíritus malignos, los combatan en todas partes, confundan su osadía y los arrojen al infierno.

Gloriosísima Madre de Dios, envía tus ejércitos invencibles para que nos ayuden en la lucha contra los emisarios del infierno entre los hombres; frustra y anula los planes de los CARDENALES, OBISPOS, SACERDOTE Y RELIGIOSOS QUE BUSCAN ALTERAR EL SAGRADO DEPOSITO DE LA FE, confúndelos y concédeles la gracia de la luz y conversión, para que con nosotros alaben a la Santísima Trinidad y honren a ti, nuestra Madre clemente, piadosa y dulce.

Patrona poderosa, que tus Ángeles protejan tus Iglesias y Santuarios en todo el mundo. Que protejan las casas de Dios, los lugares sagrados, las personas y cosas, y especialmente la Santísima Eucaristía. Presérvalas de la profanación, del robo, de la destrucción y desacralización. Presérvalas, Señora nuestra!

OH Madre celestial, se asimismo el amparo de nuestras cosas, de nuestras moradas y familias contra la maldad y astucia de nuestros enemigos visibles e invisibles. Que tus santos Ángeles habiten en ellas y reine devoción, paz y gozo en el Espíritu Santo!

¿Quién como Dios? ¿Quién como tú, Reina de los Ángeles y Terror del infierno? OH clemente, OH dulce Madre de Dios, y Madre inmaculada del Rey de los Ángeles “que ven continuamente la cara del Padre que está en los cielos”, Tu eres para siempre nuestro amor y amparo, nuestra esperanza y nuestra gloria!

San Miguel, santos Arcángeles, defendednos, protegednos! Amen.



ORACION A SAN JOSE

A ti, bienaventurado San José, acudimos en nuestra tribulación; y después de invocar el auxilio de tu Santísima Esposa solicitamos también confiados tu patrocinio. Por aquella caridad que con la Inmaculada Virgen María, Madre de Dios, te tuvo unido, y por el paterno amor con que abrazaste al Niño Jesús, humildemente te suplicamos vuelvas benigno los ojos a la herencia que con su Sangre adquirió Jesucristo, y con tu poder y auxilio socorras nuestras necesidades.

Protege, Providentísimo Custodio de la Sagrada Familia la escogida descendencia de Jesucristo; aparta de nosotros toda mancha de error y corrupción; asístenos propicio, desde el cielo, fortísimo libertador nuestro, en esta lucha con el poder de las tinieblas: y, como en otro tiempo librasteis al Niño Jesús del inminente peligro de la vida, así ahora, defiende a la Iglesia Santa de Dios de las asechanzas de sus enemigos y de toda adversidad, ya cada uno de nosotros protégenos con el perpetuo patrocinio, para que, a tu ejemplo y sostenidos por tu auxilio, podamos santamente vivir y piadosamente morir y alcanzar en el cielo la eterna felicidad. Amén.